Con profundo dolor por la muerte del padre Juan Viroche comunicamos las palabras del obispo de Añatuya y presidente de la Fundación Gottau, monseñor José Melitón Chávez
Hermanos queridos todos.
Quiero compartir con ustedes el enorme dolor y la tristeza en mi corazón por la muerte trágica y confusa de un sacerdote de Tucumán, el padre Juan Viroche, a quien conocí desde el seminario, siendo yo su formador y por muchos años hermano en el presbiterio.
Los últimos años, desde distintos lugares acompañábamos pastoralmente a los jóvenes que sufrían por el consumo de drogas.
Todo Tucumán esta dolido, su familia, su parroquia, los curas.
Les pido que mañana en todas la misas nos unamos a la Iglesia hermana y nos sumemos al compromiso de luchar por la Vida, la Verdad y la Justicia.
Yo, distante geográficamente, pero muy cercano con el corazón los bendigo y les pido que recen por mi.
Un abrazo a todos.